Hugo Jarquín, entre escándalos de faldas, hijos abandonados y desvío de recursos quiere ser presidente municipal.
Oaxaca, Oax.- Uno de los políticos oaxaqueños más connotados por los escándalos que lo rodean es el nada ponderado Hugo Jarquín, quien de pasar a dirigir una organización de comerciantes, ha tejido toda una red de corrupción e impunidad para vivir, -él, sus amantes y esbirros-, del erario público, a costa de los recursos de los oaxaqueños.
Este repudiado personaje ha decidido contender –nuevamente-, por el cargo de Presidente Municipal, no importándole su oscura participación en los comicios pasados, en donde a través del Partido Unidad Popular (PUP), pactó la pérdida de la coalición que encabezaba Francisco Reyes, al dividir los votos con su candidatura, obteniendo de botín la Regiduría de Mercados y la dirección del Instituto Municipal de la Mujer (IMM).
La regiduría fue tomada rápidamente por su suplente Francisco Javier Jiménez Jiménez, -ya que Jarquín renunció a ella por una nada despreciable diputación federal-, y la dirección del IMM estaba planeada para su entonces pareja, “Cielito Espinoza”, quien esperaba a la última hija, -conocida-, del político.
Desafortunadamente para la pobre mujer, pudieron más las calenturas andropáusicas de Hugo Jarquín, quien decidió tomar como su nueva amante a Eva Patricia Bravo Espinoza, botando a la madre de su hija y regresándola a su tierra natal Jalapa del Márquez, sin ningún tipo de apoyo o manutención para su bebé.
Cabe resaltar que el político oaxaqueño tiene siete hijas a los cuales no les proporciona ningún apoyo económico y ha dejado desprotegidos y en el total abandono.
Esta es la verdadera razón de que Hugo Jarquín pusiera al frente del IMM a su última amante Bravo Espinoza, para evitar que las denuncias en su contra que pudieran presentarse en este órgano prosperen.
Por otro lado, esta examante de Salmón Jara venía huyendo de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Forestal y Pesca (Sedafpa), tras serias acusaciones de actos de corrupción, por las cuales fue denunciada y con las que dio a conocer sus habilidades para el desvío de recursos.
Habilidades con las que apoya a Hugo Jarquín, desviando los recursos asignados a albergues para la campaña del desvergonzado político, que ahora aspira a ser presidente municipal, en busca de más dinero para acabar de construir su mansión -que funciona de nido de amor-, ubicada por el rumbo de Santa Lucía.
Con estos recursos robados del pueblo, también han pagado dos números de una revista, para que tanto él como su amante aparezcan en la portada, haciendo creer que hay simpatía de los oaxaqueños a su persona, hecho totalmente alejado de la realidad.
Increíblemente, después de todos los escándalos que ha protagonizado, Hugo Jarquín pretende verle la cara de nuevo a los oaxaqueños, al hacerles creer que tiene interés en gobernar la ciudad, pues sólo el tiempo dirá qué ganancias obtendrá de esta nueva incursión en el proceso electoral.

